Ir al contenido principal

2.1 Romeo y Julieta

2.1 Romeo y Julieta:

William Shakespeare  escribe la tragedia de Romeo y Julieta en 1597. La historia de dos jóvenes enamorados que, a pesar de sus familias rivales, luchan por su amor hasta el punto de casarse secretamente. Aunque el destino les será adverso y les conducirá al suicidio, es por ello también por lo que se han convertido en el símbolo y representación del amor trágico enfrentado a un destino fatal,"frustrado por una estrella maligna" que ya hemos visto en la epopeya épica o en el Decamerón.
Shakespeare comenzó a escribirla en 1591 perteneciendo, por tanto, al final de todo un conjunto de obras de su primera época llegando a terminarla en 1595, sin embargo, otras fuentes mantienen la hipótesis de que la terminó de escribir en 1597.
 El autor tomó  elementos de dos obras: la traducción inglesa The Tragical History of Romeus and Juliet, 1562  de un cuento italiano de Mateo Bandello, realizada por Arthur Brooke,  y de la obra de William Painter que fue publicada en la colección de historias Palace of Pleasure. Además  creó nuevos personajes secundarios como Mercucio y Paris.
Desde un punto de vista estilístico, las semejanzas de Romeo y Julieta con El sueño de una noche de verano, así como con otras obras de entre 1594 y 1595, inciden en la posibilidad de que pudiese haber sido escrita entre 1591 y 1595.
La primera edición de Romeo y Julieta es de 1597 y fue publicada por John Danter en formato de cuento. Las diversas diferencias que presenta su texto respecto de ediciones posteriores, ha sido motivo para que haya sido catalogada como una mala versión; T. J. B. Spencer, un editor del siglo XX, describió su texto como "detestable. Una reconstrucción a partir de los recuerdos imperfectos de uno o dos actores", sugiriendo que se trata de una copia ilegal.[7] Se ha aducido también que sus defectos derivan de que, al igual que ocurre con otros textos teatrales de la época, pudo haber sido publicado antes de su representación.[8] No obstante, su aparición respalda la hipótesis de que 1596 es la última fecha posible para la composición de Romeo y Julieta.[5]

La segunda edición, conocida como Q2, llevaba como título La excelente y lamentable tragedia de Romeo y Julieta. Fue publicada en 1599 por Cuthbert Burby y editada por Thomas Creede. Respondiendo a lo indicado en la portada (el texto ha sido "corregido, aumentado y revisado"), incluye unos 800 versos más.
La reedición de la obra ha sido constante desde entonces y, a partir de la era victoriana, su edición ha ido acompañada de notas explicativas sobre sus fuentes y el contexto cultural y social en que fue producida.
Desde 1592 Shakespeare se queda prácticamente solo en la producción teatral. Y es, en medio de esa época, que Romeo and Juliet es una excepción singular, tanto respecto a los dramas de crónica histórica como a las comedias: por otra parte, se distingue de las tragedias posteriores en que el transcurso y la catástrofe de la acción derivan más de la casualidad que del modo de ser de los personajes mismos –lo cual la hace más superficial e ingenua que posteriores obras maestras, pero también le evita que los personajes acaben siendo más interesantes que los argumentos-. Aquí Shakespeare ha establecido un modus vivendi  o modo bastante estable entre lo trágico y lo cómico, que marca aproximadamente el criterio desde ese momento vigente en su contraste del humor popular con el centro noble y terrible de la acción. Será muy frecuente introducir momentos de humor al lado mismo de los momentos de mayor dolor; así, por ejemplo, apenas se descubre a Julileta muerta, tiene lugar un intermedio de retruécanos cómicos entre los músicos que deberían tocar melodías fúnebres. Y, por otra parte, los personajes cómicos pueden tener ahora una fisonomía humana tan marcada como los trágicos. Pero no son dos mundos separados hay cruces y elementos intermedios de especial humanidad. Aquí es importante ver aparecer un estilo nuevo en boca del ama de Julieta: coloquial, pero no burlesco; emocionante por su sencillez con un nuevo sentido del verso y de la expresión en escena por su frescura, capaz de reflejar la charla entrecortada y divagante de una mujer recordando la infancia de Julieta y a su hijita muerta. Siglos enteros tardará la poesía en aprovechar lo que aquí ha descubierto Shakespeare de pasada: la belleza de los pequeños recuerdos, de lo humilde de cada día.  Será precedente de “las sirvientas de buen corazón” de Baudelaire, de las de César Vallejo o la criada pepona de Luís Rosales. Ni el mismo Shakespeare sacará partido de esta innovación. Ni tampoco en otra, la del personaje poético sin otra función, como Mercuccio y su famosa tirada sobre los sueños y la reina Mab.
La técnica dramática utilizada en su creación ha sido elogiada como muestra temprana de la habilidad del dramaturgo. Entre otros rasgos, se caracteriza por el uso de fluctuaciones entre comedia y tragedia como forma de aumentar la tensión, por la relevancia argumental que confiere a los personajes secundarios y por el uso de subtramas para adornar la historia. Además, en ella se adscriben diferentes formas métricas para los distintos personajes, que, en ocasiones, terminan cambiando de acuerdo con la evolución de los mismos personajes; por ejemplo, Romeo se va haciendo más experto en el uso del soneto a medida que avanza la trama. La tragedia ha sido adaptada en numerosas ocasiones para los escenarios, el cine, los musicales y la ópera.

La cuestión sobre si Romeo y Julieta existieron resulta ambigua: Existen registros en los que Giralomo della Corte, un italiano que vivió en la época de Shakespeare, afirma que la relación de los dos jóvenes amantes había ocurrido realmente en 1303, aunque ello no ha podido ser comprobado con certeza. Lo único que puede afirmarse es que las familias Montesco y Capuleto sí que existieron realmente, aunque no se sabe si vivieron en la península Itálica y tampoco se puede certificar que hayan sido rivales.
Otra fuente literaria que menciona a las dos familias es La Divina Comedia, del italiano Dante Alighieri. En este poema, Dante cita a los Montesco y a los Capuleto como participantes de una disputa comercial y política en Italia delos mercaderes medievales (ambas familias se encuentran en el purgatorio, tristes y desoladas.)
 Sin embargo, para ciertas personas como el historiador Rainer Sousa, el amor trágico y desmedido de Romeo y Julieta, parece instaurar un arquetipo del amor ideal, muchas veces distante de las experiencias afectivas cotidianamente experimentadas. Tal vez por eso, varios acreditan que el amor sin medida, como el del caso shakespeariano, es real».
Junto a Hamlet, Romeo y Julieta es una de las obras más escenificadas de Shakespeare.Asimismo, sus numerosas adaptaciones han pasado a convertirla en una de sus historias más famosas y perdurables.

Argumento ("La vida es mi tortura y la muerte será mi descanso”, Romeo).

La representación y puesta en escena comienza con una disputa callejera entre los Montesco y los Capuleto. El príncipe de Verona, Della Escala, interviene entre ellos y declara un acuerdo de paz que en caso de ser violado habría de ser pagado con la muerte. Después de los sucesos, el conde Paris se reúne con el señor Capuleto para conversar sobre la idea de contraer matrimonio con su hija, pero Capuleto le pide que espere durante un plazo de dos años más, tiempo tras el cual Julieta cumpliría quince años. Aprovechando el ofrecimiento, le sugiere que organice un baile familiar de carácter formal para celebrar tal acontecimiento. Mientras tanto, la señora Capuleto y la nodriza de Julieta, intentan convencer a la joven de que acepte casarse con Paris.
En diferentes circunstancias, Benvolio habla con su primo Romeo, hijo de los Montesco, sobre su más reciente depresión. Convencido de que la tristeza de su primo se debe al amor no correspondido de una joven llamada Rosalinda —sobrina del señor Capuleto—, Benvolio le informa acerca del baile familiar de los Capuleto. Finalmente, Romeo acepta acudir sin invitación a la ceremonia, esperando encontrarse con Rosalinda. No obstante, cuando llega al hogar de los Capuleto, se encuentra con Julieta y se enamora perdidamente de ella. Tras concluir el baile, en la secuencia conocida como "la escena del balcón", Romeo se infiltra en el patio de los Capuleto y escucha secretamente a Julieta, quien está en el balcón de su dormitorio, admitiendo su amor por él a pesar de la hostilidad entre su familia y los Montesco.
Con el paso del tiempo, el joven comienza una serie de encuentros con la muchacha, hasta llegar al momento en que ambos deciden casarse. Con la asistencia de Fray Lorenzo, quien espera reconciliar a los grupos rivales de Verona a través de la unión de sus hijos, al día siguiente del juramento de amor, los enamorados se casan en secreto. Ofendido por la intromisión de Romeo en el baile familiar, Teobaldo —primo de Julieta— reta al joven a un duelo. Sin embargo, Romeo evade el combate. Impaciente tanto por la insolencia de Teobaldo como por la "cobarde sumisión de Romeo", Mercucio —amigo de Romeo— acepta el duelo, aunque resulta mortalmente herido por Teobaldo. Dolido ante la muerte de su amigo, Romeo retoma el enfrentamiento y logra asesinar al primo de Julieta. A consecuencia de lo anterior, el príncipe exilia al joven de la ciudad, reiterando que si regresa, "sería lo último que haría en su vida". Malinterpretando la tristeza de su hija, el señor Capuleto decide ofrecerla en matrimonio al conde Paris, intentando convencerla de aceptarlo como esposo y convertirse en su "feliz consorte". Finalmente, la joven acepta bajo la condición de prolongar la boda, aun cuando su madre se niega terminantemente. Mientras tanto, Romeo pasa la noche secretamente en la alcoba de Julieta, donde ambos tienen relaciones sexuales.
Julieta visita a Fray Lorenzo para pedirle sugerencias, y éste conviene en ofrecerle una droga que la induciría a un intenso coma con duración de dos horas y cuarenta minutos. Una vez que la joven acepta llevar a cabo la farsa, el fraile le promete enviar un mensaje a Romeo, informándole sobre su plan secreto, por lo que podría volver cuando ella despierte. La noche anterior a la boda, Julieta ingiere la droga y sus familiares, al creerla muerta, depositan su cuerpo en la cripta familiar.
A pesar de su promesa incondicional, el mensaje de Fray Lorenzo nunca llega a Romeo y, en cambio, éste se encuentra con Baltasar (uno de sus sirvientes), quien le informa de la repentina muerte de Julieta. Frustrado ante semejante noticia, Romeo decide comprarle al boticario de la ciudad un eficaz veneno, antes de acudir a la cripta donde se encuentra Julieta. Al llegar, se encuentra con Paris, quien momentos antes había estado llorando sobre el "cuerpo inerte" de su amada. Creyendo que Romeo es un saqueador de tumbas, el conde lo enfrenta pero muere asesinado por el joven. Convencido todavía que su amada está muerta, Romeo procede a beber el veneno. Al despertar del coma inducido, Julieta se encuentra con los cadáveres de Romeo y Paris en la cripta; incapaz de hallar una solución a tales circunstancias, determina atravesarse el pecho con la daga de su esposo. Tiempo después, los Montesco y los Capuleto, acompañados del príncipe, se percatan de la muerte de los jóvenes y del conde. Absorto por la trágica escena, Fray Lorenzo comienza a relatar la historia completa del "amor prohibido" entre Romeo y Julieta. Su revelación consigue terminar con la rivalidad entre ambas familias.
Romeo y Julieta finaliza con la elegía de Della Escala sobre el "amor imposible" de los jóvenes: "Nunca ha habido una historia más trágica / que ésta, la de Julieta y su Romeo..."

 

TEMAS  y SIMBOLOS: en Romeo y Julieta

La mayoría de los académicos no ha podido asignar una temática específica a la obra. Existe una propuesta derivada del estudio de los personajes en la que el ser humano, sin ser completamente bueno o malo, posee rasgos de ambos aspectos. Aunque esta propuesta no ha contado con suficiente apoyo, y no se ha podido encontrar un tema central, hay varios temas secundarios que se enredan de manera compleja en la trama. Sus diferentes interpretaciones continúan siendo estudiadas por diversos académicos y expertos en la vida de Shakespeare.  

Amor

El amor intemporal es uno de los elementos representativos de Romeo y Julieta.  Con el paso del tiempo, sus protagonistas han pasado a ser considerados como iconos del "amor joven destinado al fracaso". Varios estudiosos han explorado el lenguaje y contexto histórico existentes en el trágico romance.
En su primer encuentro, Julieta y Romeo utilizan una forma de comunicación (metáfora) recomendada por varios autores convencionales durante la época en que vivió Shakespeare. Haciendo uso de ellas al implicar las palabras "santo" y "pecado", Romeo fue capaz de evaluar los sentimientos de Julieta hacia él, en un modo inusual. Este método también fue apoyado por el escritor italiano Baltasar de Castiglione (cuyas obras, en su mayoría, fueron traducidas al idioma inglés). Además Castiglione aconsejó que, en caso de que un hombre usara una metáfora a manera de invitación para una mujer, ella podría fingir que no lo entendió, con lo que su pretendiente podría retirarse sin perder su honor. Contrariamente, Julieta participa en la metáfora, expandiéndola. Los términos religiosos "sepulcro", "senda" y "santo" eran muy populares en la poesía de ese entonces, mostrando una propensión al tono romántico, más que a una indirecta blasfemia —el término "santidad" fue asociado con el catolicismo algunos años antes del escrito—.Más adelante, en el mismo texto, Shakespeare determinó remover la más clara referencia a la resurrección de Cristo y la Pascua, elementos presentes en The Tragical History of Romeus and Juliet.
En la "escena del balcón" de Shakespeare, Romeo escucha discretamente el soliloquio de Julieta. No obstante, en la versión de Brooke, ella hace su declaración de amor estando sola. Al introducir a Romeo en la escena donde escucha a escondidas, el autor se deslinda de la secuencia normal del cortejo. Normalmente, se solicitaba que una mujer siguiera un patrón de conducta basado en la modestia y la timidez, con tal de asegurarse de que su pretendiente fuese honesto. La razón de desviarse de la secuencia mencionada, se debe a que Shakespeare quiso agilizar un poco la trama. De esta forma los jóvenes enamorados se vuelven aptos para evadir parte del proceso de cortejo, desplazando el relato, que inicialmente se halla centrado en el desarrollo de su relación sentimental, a un contexto mayormente enfocado en su decisión de contraer matrimonio (tras descubrir sus sentimientos mutuos en una sola noche).
 En la escena final del suicidio, existe una contradicción en el vínculo con la religión católica, pues los suicidios son considerados por ésta como un pecado que debe ser castigado en el infierno, aunque quienes recurren a éstos con tal de estar con su enamorado ("amor cortés") se vuelven acreedores al paraíso, en donde estarán acompañados de su amante. Es así como el amor entre Romeo y Julieta tiende a ser más platónico que religioso. Otro punto a considerar es la consumación del amor (relaciones sexuales) citada en el escrito original; aun cuando el amor entre ambos era apasionado, la pareja sólo consuma su amor después de casados, cosa que les previene de perder la simpatía del público.
Es posible que Romeo y Julieta funcione como una ecuación del amor y el sexo, con la muerte. A lo largo de la tragedia, tanto él como ella (junto con otros personajes secundarios) fantasean con esta "igualdad fulminante", normalmente atribuida a un amante. Por ejemplo, el señor Capuleto es quien se percata primero de la "muerte" de Julieta, comparando este factor con el desvirgamiento de su hija.[137] Además, un poco más adelante Julieta compara, eróticamente, a Romeo con la muerte. Justo antes de suicidarse, decide emplear la daga de éste, diciendo, "¡Oh, feliz daga! Este es tu filo. Corróeme entonces, y déjame morir".]

Destino y azar

Las opiniones de varios estudiosos difieren en lo que respecta al rol que desempeña el destino en Romeo y Julieta. Pero por la importancia del destino fatal se suele describir a Romeo y Julieta con el término "Star-crossed lovers" o con estrella funesta/adversa.

"Es característico que en todas estas comedias sí mismos con la estupidez innata, no argumentada de las personas mayores y la alegría que afirma la vida y la inventiva de los jóvenes. El hilo de los amantes de su camino a través de los obstáculos creados por la vanidad de mediana edad y impercipience. Los padres son estúpidos y no sé lo que es mejor para sus hijos o ellos mismos, una comedia 

  El tema de la luz

El académico Caroline Spurgen escribió una vez: "La imagen dominante [en Romeo y Julieta] es la luz, toda forma y manifestación de ella" (de imágenes de Shakespeare, 310). Cuando Romeo inicialmente ve a Julieta, la compara de inmediato a la" brillante luz de las antorchas y cirios" que iluminan la gran sala Capuleto: "¡Oh, ella le enseña las antorchas para quemar brillante!" Julieta es la luz que lo libera de la oscuridad de su melancolía perpetua.

  En la famosa escena del balcón de Romeo Julieta asociados con la luz del sol, "es el este y Julieta es el sol" la luz del día, "El brillo de sus mejillas avergonzaría a las estrellas / Como la luz del día ¿Acaso una lámpara" (2.2.20-1), y la luz que emana de los ángeles: "¡Oh ángel de hablar de nuevo brillante"  Por su parte, Julieta compara su amor recién descubierto de un rayo , sobre todo hacer hincapié en la velocidad a la que su romance se mueve, pero también para sugerir que, como el relámpago es una ruptura glorioso en la oscuridad del cielo nocturno , también lo es su amor por un destello de luminosidad maravillosa en un mundo de otra manera oscura - un mundo donde ella es controlado todas las acciones por los que la rodean.  Cuando la enfermera no llega lo suficientemente rápido con noticias acerca de Romeo, Julieta se lamenta anuncia que el amor debe ser pensamientos "¿Qué diez veces se desliza más rápido que el sol de rayos / Manejando de regreso sombras sobre bajando colinas" En un juego de palabras comunes, se pide a Romeo "no imputar esta dando a la luz de amor / ¿Qué tiene la noche oscura para descubrir" (2.2.105-6), una vez más la comparación de sus sentimientos mutuos de amor y consuelo a la luz brillanteva a un papel negativo, obligando a los amantes a la parte en la madrugada:

 
El tema del tiempo

Peter Quennell escribe, "... la belleza y la brevedad del amor mismo - que la luz breve ', condenado a la extinción rápida, que se celebra en Catulo"La indicación definitiva de que la oscuridad ha triunfado sobre la luz viene de El Príncipe: "Una paz esta mañana con el que trae / El sol de la tristeza no mostrará su cabeza" 
 A principios de la obra, Romeo es consciente del paso del tiempo a medida que los pinos de Rosaline: "horas tristes parecen largas" (1.1.159).  Mercucio es el primero en abordar el problema de la acelera el tiempo "perdido el tiempo", y después de su denuncia, se produce un cambio repentino y rápido movimiento.  Capuleto se lamenta de que los años pasan demasiado rápido, y Julieta advierte que su amor por Romeo es "demasiado erupción, unadvis'd demasiado, demasiado ... demasiado repentina como el rayo" Al poco tiempo comienza a ayudar en la destrucción de los amantes. Capuleto apresura por delante la fecha del matrimonio, insistiendo en casarse con Julieta París un día antes, y por lo tanto forzando a la acción rápida y fatal, en última instancia,.  
"El mundo de ritmo rápido que Shakespeare se acumula alrededor de sus personajes permite pocas posibilidades para la adhesión a un abogado Fray Lorenzo de la" prudencia y lento. "En un mundo de caer trágicamente es, sin duda no menos inevitable de lo que es de Lear volverse loco en el rostro de la ingratitud humana. " (Cole, 17).  Al igual que con la manipulación de Shakespeare del tema de la luz, se puede decir que trata  el tiempo como una fuerza cada vez más amenazante contra los amantes .

El tema del destino
As Bertrand Evans señala: "Romeo y Julieta es una tragedia de la falta de conciencia" más que cualquiera de otras obras de Shakespeare." "El destino, o el cielo, como el Príncipe lo llama, o el" poder superior ", como el fraile lo llama, la elaboración de su propósito, sin el uso de un villano ya sea humano o un agente sobrenatural enviado a intervenir en los asuntos mortales, opera a través de . la condición humana común de no saber los participantes en la acción, algunos de ellos en partes que son menores y parecen insignificantes, contribuyen uno por uno los puntos indispensables que hacen que el patrón, y contribuir a que no sabe, es decir, actúan cuando no saben la verdad de la situación en la que actúan, esta verdad se sabe, sin embargo, a nosotros que somos espectadores. "  La idea de que la fortuna dicta el curso de la humanidad se remonta a tiempos antiguos.
Los escritores del mundo medieval incorporó a la diosa Fortuna en el cristianismo y la hizo el siervo de Dios, responsable de la adición de los retos a nuestras vidas para que pudiéramos ver la importancia de renunciar a nuestra vida terrenal tumultuosa a Dios.  El influyente tratado más sobre el tema del destino fue La Consolación de la Filosofía, escrito por el erudito Boecio (475-525 dC). ." Y "[e] l propósito de este énfasis es claro El cuento termina con la muerte de dos jóvenes populares deslumbrante atractivo;. Y el dramaturgo debe exonerarse de toda complicidad en su asesinato, para que no sea declarado culpable de complacer a una afición de un desastre humano. Se desconoce la responsabilidad y la arroja sobre el destino, el destino. " (Charlton, Shakespearean Tragedy , 52). (Charlton, la tragedia de Shakespeare, 52).. Así, a pesar de la belleza lírica de la obra y las cualidades entrañables de Romeo y su Julieta, (que tienen asegurado su lugar como uno de los grandes dramas), que no llegan al nivel de otras tragedias de Shakespeare, que exploran las fallas internas de la humanidad.
Generalmente, en el plano literario, se considera que el tiempo está vinculado con la luz y la oscuridad. En la época de Shakespeare, las obras teatrales eran usualmente representadas al mediodía, en plena luz del día. Esto pudo haber obligado al autor a que usara palabras que crearan una ilusión dual del día y la noche en sus escritos. Además, Shakespeare utilizó referencias para las estrellas, la luna, el sol y el día junto a la noche para poder crear esta percepción. De forma similar, hizo que algunos de sus personajes refirieran a los días de la semana y a horas específicas para ayudar a que la audiencia comprendiera cuánto tiempo ha transcurrido en su historia. En conjunto, no menos de 103 referencias se han encontrado en la obra para ayudar a entender este paso del tiempo.[156]

Análisis e interpretación

Los críticos le han encontrado muchos puntos débiles y aún así continúa siendo considerada como una de las mejores obras de Shakespeare. El poeta John Dryden elogió el material así como la comicidad de su personaje Mercuccio diciendo:
Shakespeare mostró la que podría ser la mejor de sus habilidades en su Mercucio, y dice asimismo, se vio obligado a asesinarlo en el Acto III para prevenir que éste lo matase a él.
Ciertamente, el análisis crítico de la trama en el siglo XVIII fue menos escaso, aunque no menos dividido. El dramaturgo Nicholas Rowe fue el primero en reflexionar sobre la temática de la obra, la cual percibió como "el justo castigo de dos familias enfrentadas". A mediados del siglo, el escritor inglés Charles Gildon y el filósofo escocés Lord Kames, sostuvieron que la obra era un fracaso en la medida de que no seguía las reglas básicas del drama: la tragedia debe ocurrir a causa de alguna hamartia o  error trágico según Aristóteles.
En la última parte del siglo XVIII, y durante el siglo XIX, las opiniones se centraron en debates sobre el mensaje moral del escrito. El actor y dramaturgo David Garrick, en su adaptación de 1748, excluyó a Rosalinda pues consideró que la situación de Romeo abandonándola por Julieta era algo temerario. Algunos críticos como Charles Dibdin sostenían que Rosalinda había sido incluida a propósito en el guión para mostrar qué tan temerario era el héroe, siendo esta la razón de su final trágico. Otros argumentaron que Fray Lorenzo pudo haber sido el portavoz de Shakespeare en sus advertencias contra la precipitación obsesiva. Con el advenimiento del siglo XX, estos argumentos morales quedaron en disputa por analizadores como Richard Green Moulton, quien mencionó que los accidentes condujeron a la muerte de los amantes, descartando los defectos de los personajes como causa de los sucesos finales (hamartia o destino trágico)
En Romeo y Julieta, Shakespeare emplea varias técnicas dramáticas que han recibido aclamación entre la crítica. El principal rasgo elogiado al respecto es el cambio repentino de la comedia a la tragedia, situación que puede ejemplificarse en la conversación calambur (juego de palabras) de Romeo y Mercucio momentos antes de que llegue Teobaldo. Previo a la muerte de Mercucio en el Acto III, el guión tiende hacia una postura más cómica. Sólo después de ese momento, adopta un tono serio y trágico. Aun cuando Romeo es desterrado, y no ejecutado, mientras Fray Lorenzo le sugiere un plan a Julieta para que ella pueda reunirse con su amado, la audiencia todavía puede esperar a que todo finalice bien entre ellos. De forma imperceptible, el público queda en un "intenso estado de suspense" para cuando inicia la última escena en la tumba: si Romeo se retrasa lo suficiente como para que Fray Lorenzo pueda llegar a tiempo, el primero y Julieta podrían salvarse. Estas permutaciones que van desde la esperanza hasta la desesperación, para continuar con el indulto y un nuevo sentimiento de optimismo, sirven para enfatizar la tragedia en el final, donde la última esperanza ha quedado descartada y ambos protagonistas mueren en la última escena.
El autor también hace uso de argumentos secundarios para ofrecer una visión más clara de las acciones desarrolladas por cada uno de los personajes principales. Por ejemplo, al comienzo del relato, Romeo está enamorado de Rosalinda, quien se había mantenido indiferente ante sus insinuaciones románticas. La infatuación de Romeo provocada por los rechazos de ella, está en un contraste evidente respecto a su posterior enamoramiento con Julieta. Lo anterior, proporciona una comparación a través de la cual, la audiencia puede observar la seriedad de la relación entre los amantes. El amor de Paris por Julieta, establece igualmente una disparidad entre los sentimientos que la moza tiene por él y la afectividad que al mismo tiempo tiene por Romeo. El lenguaje formal que ella utiliza con Paris, así como la manera en que habla de él con su nodriza, muestra que sus sentimientos están sólo con Romeo. Más allá de todo esto, la historia complementaria del enfrentamiento entre las familias Montesco y Capuleto se agrava en lo sucesivo, suministrando una atmósfera de odio fundamental que, a últimas instancias, se convierte en el principal factor para que la historia finalice trágicamente.
Algunos críticos psicoanalistas han percibido que el problema de Romeo y Julieta, en términos de la impulsividad de Romeo, proviene de una "agresión mal controlada y parcialmente encubierta" que, a últimas instancias, conduce tanto a la muerte de Mercucio como al doble suicidio. Asimismo, consideran que la trama no es psicológicamente muy compleja; mediante un análisis disciplinario, la experiencia trágica masculina resulta equivalente a una enfermedad. En 1966, Norman Holland consideró el sueño de Romeo[ como un auténtico "deseo lleno de fantasía tanto en términos de su mundo adulto como de su hipotética infancia en las etapas oral, fálica y edípica" —reconociendo que un personaje dramático no es un ser humano con procesos mentales separados de los que presenta el autor—.Otros críticos de esta disciplina, tales como Julia Kristeva, se enfocan en el odio existente entre las familias. Así, argumentan que el odio provoca a su vez la pasión mutua de Julieta y Romeo. Igualmente, esa aversión se manifiesta directamente en el lenguaje de los amantes: por ejemplo, Julieta recita que "mi único amor sólo surge de mi único odio", en ocasiones expresando su pasión por medio de una anticipación de la muerte de Romeo. Lo anterior conduce a una especulación sobre la psicología del dramaturgo, en particular sobre la consideración del dolor de Shakespeare por la muerte de su hijo, Hamnet.

 




Comentarios

Entradas populares de este blog

Estilo directo, indirecto e indirecto libre en la novela realista. (Para práctica de examen)

1.     El estilo directo es la forma que usa el narrador para reproducir textualmente las palabras de los personajes. Se usan marcas gráficas como el guion de diálogo, comillas o dos puntos para introducirlas. Bajó la cabeza y se tomó la frente con la mano derecha. —Eso es lo que está buscando este mocoso —dijo, como para sí, pero en voz alta—. Que me dé un ataque al corazón y me muera. . . Ricardo había vuelto lenta y silenciosamente a asomarse a la puerta de la cocina. Había recogido, incluso, su camisa del suelo. —Ahí vas a estar contento, ahí vas a estar contento —prosiguió Clara, advirtiendo su reaparición—. Ahí sí. Ahí ya no vas a tener a la pobre vieja imbécil controlándote, ahí vas a estar feliz. Eso es lo que querés. Eso. “La pura verdad”, de Roberto Fontanarrosa El hijo se va a jugar al billar, y en el momento en que va a tirar una carambola sencillísima, el otro jugador le dice: "Te apuesto un peso a que no la haces". “Algo muy grave va a suce

EXAMEN DE LA PRÁCTICA DE SELECTIVIDAD: 3, 4 Y 5

NARRACIÓN OCTAVA Uno siente celos de la mujer, y ella, atándose una cuerda a un dedo por la noche, siente llegar a su amante, el marido se da cuenta, y, mientras persigue al amante, la mujer pone en el lugar suyo en la cama a otra mujer, a quien el marido pega y corta las trenzas, y luego va a buscar a sus hermanos; los cuales, encontrando que aquello no era verdad, le injurian.   Extrañamente maliciosa parecía a todos que doña Beatriz había sido al burlarse de su marido y todos afirmaban que el miedo de Aniquino debía de haber sido muy grande cuando, sujetándolo fuertemente la señora, la oyó decir que él le había requerido de amores. Pero luego de que el rey vio callarse a Filomena, volviéndose hacia Neifile, dijo: -Decid vos. La cual, sonriendo primero un poco, comenzó: -Hermosas señoras, gran peso me incumbe si quiero co