NARRACIÓN OCTAVA Uno siente celos de la mujer, y ella, atándose una cuerda a un dedo por la noche, siente llegar a su amante, el marido se da cuenta, y, mientras persigue al amante, la mujer pone en el lugar suyo en la cama a otra mujer, a quien el marido pega y corta las trenzas, y luego va a buscar a sus hermanos; los cuales, encontrando que aquello no era verdad, le injurian. Extrañamente maliciosa parecía a todos que doña Beatriz había sido al burlarse de su marido y todos afirmaban que el miedo de Aniquino debía de haber sido muy grande cuando, sujetándolo fuertemente la señora, la oyó decir que él le había requerido de amores. Pero luego de que el rey vio callarse a Filomena, volviéndose hacia Neifile, dijo: -Decid vos. La cual, sonriendo primero un poco, comenzó: -Hermosas señoras, gran peso me incumbe si quiero co
En el soneto que vamos a analizar, titulado: "A una transeúnte",apreciamos varios aspectos:
ResponderEliminarEn la primera estrofa, podemos apreciar la representación de una parte de una zona urbana, en la cual se presenta una mujer con características típicas de una escala social baja, debido a su delgadez y a su vestimenta, que son consecuencias del hambre y la pobreza.ademas, desprende un cierto sentimiento de dolor al apreciarla, como se nos refleja en la frase:(...)una mujer...de dolor soberano.
En la segunda estrofa, sin embargo, toma otro punto de vista, desde el cual, se la representa como una mujer ágil y noble, cuyos ojos, que a lo largo de la historia han representado el reflejo del alma, provocan crispación y perdida de cordura, como el mayor placer que se pudiese experimentar. Así, tras exponer este estado de ánimo que provoca dicha mujer en el yo-lírico, este expone, que posee un encanto característico que atrae, e incluso podría provocar un placer mortal. Un aspecto que podemos apreciar en el mundo del arte, en obras tan destacadas, como la escultura de Apolo y Dafne.
Ya en los dos últimos tercetos, se ensalza la imagen de dicha mujer, pero desde un punto de vista mas subjetivo que aporta el yo-lírico.Reflejando una sola de sus miradas, como un aspecto de gran importancia existencial, cuya importancia le es tal como el propio poder de "renacer de entre los muertos".Dicha exageración, se refiere al estado de manipulación y marginación al que se ve obligado a obedecer la clase baja que representa este personaje que se esta describiendo, y cuyo acercamiento al poeta, le provoca un cierto sentimiento de hermandad, es decir, de identificarse con la escala social a la que pertenece dicha mujer.
finalmente, este sentimiento se ve reflejado como un paralelismo al propio sentimiento del amor, que realmente, va dirigido a toda persona que representa la clase baja de la zona urbana desprestigiada y marginada de la ciudad.
Así pues, esta postura me hace recordar unas palabras de Hobbes, quien exponia literalmente:"el hombre es un lobo para el hombre",y es en estas situaciones, en las que se concluye la veracidad de dicho hecho. Pues los únicos responsables de que otros hombres semejantes a nosotros, vivan en un estatus de peor calidad y mayor pobreza, son los hombres.
Debes corregir los enlaces conectores (primera estrofa.... y punto y aparte¡¡¡)
EliminarEn le tercer párrafo cuando hablas de la frase "renacer de entre los muertos" te has ido del poema a una idea subjetiva sobre los marginados y la clase pudiente que precisamente en este poema no está.
Corrige y publícalo otra vez, quiero ver un comentario de 10 de una vez¡¡¡¡¡
Sabes que la frase es bellísima pero habla del amor a 1º vista. En fin, recuerda lo corregido en clase y be patience¡
CORRECCION
EliminarEn el soneto que vamos a analizar, titulado: "A una transeúnte", apreciamos varios aspectos:
Podemos observar la representación de una zona urbana parisiense, caracterizada por su ambiente demoledor y terrible. Así se nos muestra una visión propia y subjetiva del yo-lírico, de su pensamiento interno hacia la ciudad y su continua degradación, cuya función implicará la exaltación de un aspecto muy llamativo,una mujer.
Dicho factor instantáneo, reflejado en esta postura femenina, le provoca una peculiar fijación en sus vestimentas propias de una clase social alta, como el dobladillo, además de su figura alta y delgada, con gestos elegantes, totalmente exentos en personajes de las calles oscuras que se reflejan.
Sin embargo, de repente, los aspectos físicos toman un segundo plano, lo cual nos permite adentrarnos en una simbología mucho más característica de esta figura femenina.
Desde este nuevo punto de vista, se la representa como una mujer ágil y noble, cuyos ojos, que a lo largo de la historia han representado el reflejo del alma, provocan crispación y perdida de cordura, como el mayor placer que se pudiese experimentar. Así, tras exponer este estado de ánimo que provoca dicha mujer en el yo-lírico, este expone, que posee un encanto característico que atrae, e incluso podría provocar un placer mortal. Un aspecto que podemos apreciar en el mundo del arte, en obras tan destacadas, como la escultura de Apolo y Dafne.
Tras esta exposición de los aspectos que destacan en esta mujer en el poema, podemos reflejar la ruptura de uno de los tópicos clásicos universales, la imagen de la “Donna Angellicata”.
El porte clásico de esta figura, inspiradora en la gran mayoría de artistas de la humanidad, queda desplazado de sus características clásicas, rompiendo con la monotonía, el carácter más importante que, a su vez, es responsable de la degradación del ambiente tan desesperanzador y fúnebre que adopta la ciudad para este yo-lírico.
Así pues, se refleja la importancia de esta mujer para el poeta, representándola como su semejante, al ir “de riguroso luto y dolor soberano”, ante desgracias universales para su existencia, aunque no tengan por que ser las mismas, en el caso del yo-lírico, por ejemplo, se trata de la ciudad que le rodea y en la que vive.
Se produce así, un giro del sentimiento de correspondencia, en el cual predomina el amor a primera vista, y no la identificación social, como un flechazo azaroso del destino, como consecuencia de una simple mirada. Dicha mirada, definida como el reflejo de la pura “beldad” que representa para el poeta, le permite creer en la esperanza, en el “renacer” de su antiguo y fastuoso recuerdo de la ciudad.
Sin embargo, es consciente de que dicho factor es efecto de su destino azaroso, puesto que una vez perdido el contacto visual y perderla de vista, es consciente de su infinita perdida, tanto sentimental, a la hora de expresar sentimiento amoroso hacia algo en pleno apogeo de caracteres fatales para su existencia, como simbológica, ya que, el único esplendor en medio de dicho oscuro recuerdo desaparece, volviendo a provocar la tristeza y nostalgia de sus pensamientos.
Es así, que se hace factible un hecho ligado a la existencia vital del ser humano, basado en que el azar es un juego propio de dioses, y no de hombres, ya que el simple hecho de creer poseer algo, como en este caso un rayo de esperanza, nos hace creer que permanecerá para siempre, cuando sabemos con plena seguridad, que aquello que nos permite existir, responsable de todas nuestras experiencias y pensamientos, la vida, ni siquiera es eterna, a diferencia de los dioses, que son inmortales.
En el soneto que vamos a analizar, titulado: "A una transeúnte", apreciamos varios aspectos:
EliminarPodemos observar la representación de una zona urbana parisien, caracterizada por su ambiente demoledor y terrible.
Se nos muestra una visión subjetiva del yo-lírico hacia la ciudad en continua degradación. De repente, en medio de este París degradado al poeta le llama la atención el rostro de una desconocida bella, de negro riguroso. ç
El yo lírico interpreta que hay dolor en ella y se establece así, algo que ocurre en muchos de sus poemas: Correspondance.
El yo lírico describe los ojos de la "amada" representado el reflejo del alma.
El poeta experimenta sensaciones como el mayor placer que se pudiese experimentar.
¿Qué es el placer que da muerte?
Una belleza peligrosa porque no se puede alcanzar pero se desea. Es un imposible.
Así, tras exponer este estado de ánimo que provoca dicha mujer en el yo-lírico, este expone, que posee un encanto característico que atrae, e incluso podría provocar la muerte.
Tras esta exposición de los aspectos que
destacan en esta mujer en el poema, podemos reflejar la ruptura de uno de los tópicos clásicos universales, la imagen de la “Donna Angellicata” porque no se representa a una mujer angelical, sino a una mujer sofisticada, elegante, y que sufre. Sin embargo, por la idealización de esta "belleza fugitiva", por ser un imposible de alcanzar si entronca con esta tradición de mujeres que sirven de musas sin ser cercanas ni demasiado reales.
la degradación del ambiente tan desesperanzador y fúnebre que adopta la ciudad para este yo-lírico es un tema recurrente dentro de la collección de cuadros parisinos.
Así pues, se refleja la importancia de esta mujer para el poeta, representándola como su semejante, al ir “de riguroso luto y dolor soberano”, ante desgracias universales para su existencia, aunque no tengan por que ser las mismas, en el caso del yo-lírico, por ejemplo, se trata de la ciudad que le rodea y en la que vive.
Se produce así, un giro del sentimiento de correspondencia, en el cual predomina el amor a primera vista, como un flechazo azaroso del destino, como consecuencia de una simple mirada. Dicha mirada, definida como el reflejo de la pura “beldad” que representa para el poeta, le permite creer en la esperanza, en el “renacer” del amor.
Sin embargo, es consciente de que dicho factor es efecto de su destino azaroso, puesto que una vez perdido el contacto visual y perderla de vista, se percata de su infinita perdida, tanto sentimental como simbológica, ya que, el único esplendor en medio de dicho oscuro recuerdo desaparece, volviendo a provocar la tristeza y nostalgia de sus pensamientos.
Es así, que se hace factible un hecho ligado a la existencia vital del ser humano, basado en que el azar es un juego propio de dioses, y no de hombres, ya que el simple hecho de creer poseer algo, como en este caso un rayo de esperanza, nos hace creer que permanecerá para siempre, cuando sabemos con plena seguridad, que aquello que nos permite existir, responsable de todas nuestras experiencias y pensamientos, la vida, ni siquiera es eterna, a diferencia de los dioses, que son inmortales.
Este poema titulado``A una transeúnte´´ se encuentra dentro de la segunda edición del libro de las flores del mal.
ResponderEliminarEmpieza describiendo una situación desde el Yo lírico dentro de la gran ciudad.Describiéndonos su visión negativa sobre la ciudad , ya que parece como si la repudiara( La calle aturdida,aullaba a mi alrededor ). Sin embargo dentro de este ambiente impersonal y frío sucede algo inesperado.Pasa una joven en ese mismo instante, en la cuál Boudelaire se fija y que saca al poeta de estado de angustia y pesimismo en el que se encuentra observando la ciudad . Describe de forma magistral el encuentro fortuito entre dos miradas que se cruzan en un instante tan fugaz como eterno. Para el poeta ese instante es un frescor de felicidad puro a diferencia de lo que le rodea. Sin embargo este instante dura muy poco ya que luego se sumerge en la melancolía ya que sabe que no la volverá a ver, pues no conoce ni de dónde viene ni a dónde va.
Refleja la grandeza de una simple mirada instantánea capaz de remover aquellos sentimientos más profundos del autor (La dulzura que me fascina y el placer que me mata).
Este acercamiento por parte del autor a la transeúnte muestra un estado de hermandad ya que ambos vienen de situaciones difíciles. Pero cómo sucede en la mayoría de las ocasiones , se deja pasar las oportunidades y él mismo acepta que ella ha sido como un relámpago de luz en medio de la noche.
Con ello es inevitable que el autor se haga así mismo una pregunta de sí la volverá a ver pues si no fuera así supondría volver a caer en su mayor estado pesimista.
Provoca tres reacciones ¡ Lejos de aquí! pues ambos se alejan del punto de encuentro , pero habría posibilidad alguna de volverse a ver en otro lugar del mundo.
¡ O muy tarde! ambos coinciden en tristezas ,como si esperasen en esa mirada profunda algo del otro, sin embargo no se animan a detenerse. Después de ese momento ambos siguen su vida y propio camino.
¡o JAMÁS ha de ser! Él supone pues que ella huyó de aquella oportunidad de algo nuevo .y no que no podría buscarle ya que no se conocen.La ciudad es un lugar dónde los transeúntes se ignoran.
En los últimos versos el Yo lírico es muy prudente con respecto a sus sentimientos. Considera que a aquella mujer la podría haber amado , si el tiempo lo hubiera permitido.
Este sentimiento puro del autor también se explica en el título , pues se refleja en el hecho de haberle escrito un poema a alguien de la calle. El haber pensado en ella tras aquel momento.
Cada persona se encierra en su propio mundo y deja escapar oportunidades por miedo a arriesgarse.Sin embargo para algunos el Tren sólo pasa una vez...
La reacción de "hermandad" aquí está por debajo claramente de la atracción que esta bella mujer ejerce en Baudelaire, aunque ciertamente la puedes justificar.
EliminarSolo un frase la del negro relacionado con luto y dolor menciona que son almas gemelas que sufren en la vida. ¿Hay idealización de esta donna no angelicata?
Coméntala y tienes la puntuación completa. Siente los poemas porque vas a más y me alegro¡
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarEl tema principal de este poema de Charles Baudelaire es ''el amor a primera vista''.
ResponderEliminarEl autor describe a la mujer de la que queda prendado en el instante en que la ve. Aquí se cumple con el tópico de la ''donna angelicata'' pues se describe a la amada como una mujer noble cuya belleza hace renacer al poeta.
Por otro lado, el ''locus amoenus'' o lugar ameno para el amor deja de ser un paisaje idealizado pasando a ser las calles de París.
Podemos ver a su vez como el autor describe dicho amor ''no correspondido'' como un relámpago seguido de oscuridad. Esta misma concepción del amor fue ya descrita por el político y religioso francés Enrique Lacordaire, quien dijo: "El amor es como un rayo, nunca sabes donde va a caer hasta que cae". Cabe destacar aquí otra frase, esta vez del poeta chileno Pablo Neruda, quien en uno de sus poemas comienza diciendo: "Es tan corto el amor y tan largo el olvido".
Todas estas mismas concepciones del amor, de poetas y autores de épocas y países distintos nos demuestran como el amor es un tópico universal presente en las vidas de todos los hombres.
El propio Baudelaire muestra en este poema como el amor llega tan veloz como un relámpago ("tempus fugit"), mientras que el olvido dura toda una noche, que en contraste con el breve instante que dura un relámpago, posee un mayor peso para el alma del poeta.
Finalmente, al igual que el poema finaliza con un sentimiento de esperanza por parte del poeta, el amor siempre va acompañado de dicho sentimiento. Como seres sensibles que somos tenemos la esperanza de volver a amar y encontrar así nuestra ''felicidad'' personal, tal y como le ocurre al propio Baudelaire.
Ay Daniel¡¡¡
Eliminar¿Por qué esos bellos inicios y esas grandes poesías se van del poema? y ya haces el broche final y las citas de frases célebres de poetas o intelectuales??
Qué pasa con el comentario del contenido del fragmento que te toque en Selectividad????
Sólo analizando en el poema el locus amoenus: la ciudad de París como un monstruo degradado que se extiende en plena era industrial y que aplasta a los seres sensibles entre prisas y muchedumbres en contraste con la donna no angelicata de Baudelaire de luto y dolorida aunque bella y elegante hubieras desarrollado un comentario perfecto para tu talento???
corrige por favor.
"A una transeúnte"
ResponderEliminarLa calle de la gran ciudad, y su muchedumbre solitaria, es un escenario donde los transeúntes se ignoran. La experiencia de la incomunicación que predomina en la vision de Baudelaire sobre la ciudad está presente en este soneto en el que la ciudad deviene mundo ambiguo, espacio de posibilidades y negaciones, de emoción y de duda, de desconcierto y de reproche amoroso a una hermosa transeúnte.
Si bien es cierto que el paisaje urbano, con sus múltiples propuestas culturales y de interaccion social, nos permite el acceso a diversas posibilidades de conocimiento, no obstante este mundo moderno de la velocidad es también de los que presencian las mercancías de los escaparates y pueden encontrar sentido y correspondencia en aquello que andan buscando.
Es cierto que si la mutua circulación de sentimientos en la calle multitudinaria de una ciudad se prolongara con una persona que te fascinara, mas allá de ese primer cruce de miradas, podría cristalizar en una relación amorosa perdurable, de modo que no se quedase en un mero instante fugaz. Sin embargo, si bien el pieta sabe que esa vision encantadora no volvera a repetirse, pues el cruze de los transeuntes en la gran ciudad es azaroso.
Es de considerar que el amor a primera vista tiene que confirmarse con el dialogo, no solo con la cintemplación de la mirada y un reproche de su transitoriedad.
Debemos insistir en que este poema representa la naturaleza contradictoria y efímera del amor en la nueva naturaleza de la gran ciudad que hace emerger del anonimato colectivo a una hermosa y completa mujer, a la que sin embargo, deja escapar prefiriendo la eternización de ese instante comprendido por ambos.
Esta perspectiva del amor sitúa a Baudelaire en el paradigma simbólico del amor moderno: la fusión entre lo pasajeri y lo eterno, entre lo transitorio y lo imperecedero en el azar del encuentro de dos seres en el cruce de calles.
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ResponderEliminar"A una transeúnte"
ResponderEliminar5.1. Nos encontramos ante un soneto de Charles Baudelaire, que, en las primeras líneas podemos observar la descripción negativa que ofrece el autor de manera subjetiva con elementos despectivos sobre una zona urbana de París, para acontinuación, exaltar la presencia de una hermosa dama.
La mujer hermosa se puede decir que pertenece a la clase alta de la época por el gesto fastuoso y por las blondas de la camisa. Existen dos extremos de apreciación del sujeto en estas lineas, en un primer momento el autor realiza una descripción negativa que despues pasa a ser compensada por la visión de una hermosa dama.
A continuación, el "yo-lírico" realiza una descripción de la belleza de la mujer, ya que, queda impactado y quiere retener la imagen de ella para no olvidarla porque no la volverá a ver. Para ello ha utilizado elementos como piernas de escultura, que el autor puede llegar a imaginar y también términos como ágil y noble.
Él sabe que no la va a volver a ver y realiza una pregunta retórica por la que ya está respondida que quiere decir que no la va a volver a ver si no es después de la muerte, es decir, en la eternidad.
Al principio del soneto se refleja el estado de ánimo triste del autor que el en torno repercute de forma negativa en él y gracias a la mirada de la mujer queda tan impactado y fascinado que vuelve a nacer y a sentirse vivo.
El autor idealiza el amor a primera vista con el cruce de miradas que surge entre ambos.
El tema principal de este poema de Charles Baudelaire es ''el amor a primera vista''.
ResponderEliminarEl autor describe a la mujer de la que queda prendado en mismo el instante en que la ve. Aquí Baudelaire cumple con el tópico de la ''donna angelicata''. A pesar de que idealiza su belleza (la cual hace renacer al poeta lo que simboliza la vida), en contraste es descrita vistiendo de luto (simbolizando a la muerte y el sufrimiento).
Frente a este contraste vida-muerte, el ''locus amoenus'' o lugar ameno para el amor deja de ser un paisaje idealizado pasando a ser las calles industriales de París, las cuales son descritas de forma negativa por Baudelaire como consecuencia de la decadencia en que esta cayendo el ser humano. A pesar de la belleza de París, Baudelaire destaca principalmente su decadencia, la cual es fruto de los cambios sociales, ideológicos y políticos en que está sumida la Europa Revolucionaria del s.XIX. Dicha decadencia afecta principalmente a poetas, artistas y demás personas que dejan aflorar sus sentimientos en una sociedad que no les comprende, por lo que de alguna forma ellos mismos se consideran ''marginados'' de dicha sociedad.
Por otro lado, podemos ver a su vez como el autor describe dicho amor ''no correspondido'' como un relámpago seguido de oscuridad. El propio Baudelaire muestra en este poema como el amor llega y desaparece tan veloz como un relámpago ("tempus fugit"), mientras que el olvido dura toda una noche, que en contraste con el breve instante que dura un relámpago, posee un mayor peso para el alma sensible del poeta.
Esta misma concepción del amor fue ya descrita por el político y religioso francés Enrique Lacordaire, quien dijo: "El amor es como un rayo, nunca sabes donde va a caer hasta que cae". Cabe destacar aquí otra frase, esta vez del poeta chileno Pablo Neruda, quien en uno de sus poemas comienza diciendo: "Es tan corto el amor y tan largo el olvido".
Todas estas mismas concepciones del amor, de poetas y autores de épocas y países distintos nos demuestran como el amor es un tópico universal que está presente en las vidas de todos los hombres, en todas las épocas.
Finalmente, el poema finaliza con un sentimiento de esperanza por parte del poeta y su amada fugitiva, sentimiento que siempre acompaña al amor. Como seres sensibles que somos tenemos la esperanza de volver a amar y encontrar así nuestra ''felicidad personal'', tal y como le ocurre al propio Baudelaire pues ''todo aquel que ama tiene la esperanza de volver a amar''.