NARRACIÓN OCTAVA Uno siente celos de la mujer, y ella, atándose una cuerda a un dedo por la noche, siente llegar a su amante, el marido se da cuenta, y, mientras persigue al amante, la mujer pone en el lugar suyo en la cama a otra mujer, a quien el marido pega y corta las trenzas, y luego va a buscar a sus hermanos; los cuales, encontrando que aquello no era verdad, le injurian. Extrañamente maliciosa parecía a todos que doña Beatriz había sido al burlarse de su marido y todos afirmaban que el miedo de Aniquino debía de haber sido muy grande cuando, sujetándolo fuertemente la señora, la oyó decir que él le había requerido de amores. Pero luego de que el rey vio callarse a Filomena, volviéndose hacia Neifile, dijo: -Decid vos. La cual, sonriendo primero un poco, comenzó: -Hermosas señoras, gran peso me incumbe si quiero co
ROMEO
ResponderEliminarSucede siempre así con los excesos del amor.
A las penas que mi pecho ahora abruman
las tuyas han de unirse
para oprimirlo: así, tu amor
más luto añade al que soporto.
El amor es niebla de suspiros hecho humo.
Cuando avivado, chispas en ojos de un amante:
si se le extingue, océano de llanto enamorado.
¿Más todavía? Una discreta locura,
miel que alivia, hiel que ahoga.
Queda con Dios, amigo mío.
-Lenguaje: el lenguaje es sencillo ya que no aparecen cultismos. Sin embargo no es coloquial, ya que la forma en la que Romeo combina las palabras hace que se observe un lenguaje retórico con el que pretende embellecer las ideas que quiere transmitir. En el fragmento abundan los sustantivos ya que no se está describiendo una acción, sino un sentimiento. Se observa una fuerte antítesis entre "amor" y el resto de sustantivos (penas, luto, niebla, humo, llanto..) ya que no siente que su amo sea correspondido.
-Estilo: el estilo,característico de Shakespeare, es más complejo que el lenguaje. El texto está lleno de figuras que dificultan su comprensión, como las metáforas y el hipérbaton. Encontramos metáfora en : "penas que mi pecho ahora abruman", "el amor es niebla de suspiros hecho humo", "océano de llanto enamorado". Aunque no sea muy fuerte encontramos en los versos 2 y 3 un hipérbaton que no dificulta mucho la lectura. Por último, aparece una pregunta retórica que el mismo Romeo responde "¿Más todavía?" ; y paralelismo en el penúltimo verso: "miel que alivia, hiel que ahoga".